Ya os hemos hablado en alguna ocasión de las ventajas del renting tecnológico. Alquilar los ordenadores e impresoras de tu empresa acarrea interesantes beneficios en cuanto a comodidad, mantenimiento o renovación de equipos. Sin embargo, hoy queremos hacer foco sobre las ventajas fiscales del renting tecnológico.

¿Qué ventajas fiscales del renting tecnológico pueden beneficiar a tu empresa?

El renting es una modalidad de arrendamiento a través del cual una empresa alquila sus equipos, durante un periodo de tiempo determinado, mediante el pago de una cuota mensual. Esta cuota se beneficia de unas ventajas fiscales cuando el bien alquilado se destina a una actividad profesional. Veamos cuáles son:

1. Impuesto de Sociedades. La cuota mensual que tu empresa abona por el alquiler de los ordenadores, impresoras y demás equipamiento tecnológico es considerada un gasto. Así, es deducible en su totalidad del Impuesto de Sociedades.
2. IVA. Es deducible al 100% y la deducción se difiere a lo largo de la vida del alquiler.
3. Contabilidad. Al tratarse de un alquiler, los equipos informáticos o de impresión no tendrán que estar dados de alta en el activo de la empresa, mejorando algunos ratios contables como la rentabilidad sobre activos ya que se obtienen beneficios con menos activos.

Como ves, el tratamiento fiscal es una de las grandes ventajas del alquiler de equipos informáticos frente a su compra. Mientras el renting es deducible al 100%, la compra de equipos al contado supone un aumento del inmovilizado y afecta a los plazos legales de amortización.