Si hablamos de renting, seguramente, la primera idea que te venga a la cabeza sea un coche. Efectivamente, el renting de vehículos es el renting por excelencia. Sin embargo, hoy le cambiamos el apellido y hablamos de una de las mejores soluciones para acceder a la tecnología más innovadora a un precio muy competitivo: el renting tecnológico.
Contar con un equipamiento informático adecuado, que responda a las necesidades de tu empresa y que no te suponga quebraderos de cabeza, es un gran reto. La tecnología es clave en muchas labores de un negocio y el arrendamiento se dibuja como una de las opciones más cómodas y seguras.
El renting tecnológico te permite alquilar equipos informáticos, impresoras, software, etc., a medio y largo plazo ¿Cómo funciona? Tú pagas una cuota mensual durante el período que dura el contrato, a cambio, no solo puedes usar esos equipos, sino que además, obtienes un servicio integral que incluye mantenimientos, seguros, impuestos y gestiones.
Tanto una pyme como una gran empresa pueden ahorrar gracias al renting. Ahorran dinero, ahorran tiempo y ahorran recursos. Son tres buenos motivos para escoger este método de financiación ¿no crees? Pero si aún no lo ves del todo claro, vamos a ahondar un poco más en sus ventajas:
- Acceso a tecnología de primer nivel sin necesidad de hacer grandes desembolsos. A diferencia de la compra, el alquiler de equipos informáticos e impresoras te permite disponer de la tecnología más reciente sin hacer una gran inversión inicial. Pagas una cuota fija cada mes y te olvidas de sustos y de costes ocultos porque, además, incluye el mantenimiento y el servicio técnico.
- Mayor liquidez. Gracias al renting tecnológico, no se inmovilizan recursos de la empresa en bienes que necesitan constante renovación.
- Protección contra la obsolescencia. Si hay algo efímero, eso es la tecnología ¿Para qué comprar equipamiento informático pudiendo renovarlo cada tres años? Además, los riesgos asociados al valor residual o la inflación son asumidos por la compañía de renting, única propietaria de los equipos.
- Sencillez administrativa. Los trámites se simplifican ya que la empresa tiene centralizados todos los servicios del equipamiento informático con un solo proveedor. Un único interlocutor, un único contrato, una única factura. El tiempo es dinero y ahorrar tiempo en este tipo de tareas también supone ahorrar dinero.
- Ahorro de recursos. Dejar cualquier tarea, la que sea, en manos de alguien que realmente la domina parece ser la mejor opción ¿verdad? Con el equipamiento informático de una empresa ocurre lo mismo. Disponer de un contrato de renting tecnológico y poner en manos de expertos las engorrosas tareas informáticas supone un ahorro de recursos, ya que los empleados no tienen que encargarse de adivinar qué está pasando con la impresora o con el ordenador en cuestión.
- Ventajas fiscales. La renta de un alquiler figura como gasto y es deducible al 100%. Asimismo, el IVA se devenga en su totalidad.
El pago por uso es una filosofía tradicionalmente más asociada a las impresoras. Sin embargo, ampliar el tipo de servicios y equipamientos incluidos bajo el paraguas de renting tecnológico se sitúa como la solución más ventajosa para pymes y grandes empresas. Sin duda, alquilar los ordenadores e impresoras de tu negocio es una excelente solución para contar con este tipo de equipamiento sin preocupaciones.